martes, 25 de diciembre de 2012

2013

Estimados lectores, colaboradores y amigos:
Revista Contratiempo ha renovado sus portales para facilitar la búsqueda del material publicado.
Los proyectos para el año próximo incluyen la producción de contenidos audiovisuales, notas e informes sobre otras ciudades argentinas
 y la publicación de la Contratiempo N°4 (edición impresa).
La Editorial tiene prevista la edición de nuevos títulos en papel y algunas reediciones.
El Centro de Arte y Pensamiento se abrirá también a nuevas experiencias.
Esperamos que sigan allí, acompañándonos como siempre.
Para todos,
¡nuestros mejores deseos para el 2013!




Revista Contratiempo / Contratiempo Ediciones / Centro de Arte y Pensamiento
www.revistacontratiempo.com.ar

domingo, 23 de diciembre de 2012

MARTÍNEZ ESTRADA / NOTA DE ARCHIVO

Ezequiel Martínez Estrada

Fragmento de la entrevista realizada por Emilio A. Stevanovitch en 1964 y reproducida en el diario La Razón del 30 de diciembre de 1984 en una nota titulada Recuerdo de Martínez Estrada.



La entrevista tiene lugar en un café, algo alejado del centro, en su “refugiante” Bahía Blanca, “gris y lúgubre como puedo serlo yo”. El rostro es delgado, apergaminado; los ojos, cual incisiones en la piel, desde cuyos resquicios observa, silencioso; la frente ancha, “soy de aquellos calvos cuyo perfil  tiene aún ciertas zonas pelíferas por ofrecer”; las manos transparentes casi parecen flotar dentro de un saco que, cierta vez, fue ajustado. El gesto es parco, la voz baja y clara, la sonrisa infrecuente pero cálida. Una enfermedad cruel lo ha ido carcomiendo lenta y metódicamente. No importa. El que habla es un triunfador, pese a innúmeros “parricidas”, a crueles acusaciones de desertor, a seudo-descubridores de una Argentina sociológica y best seller que, medio siglo antes, él había oteado con mayor agudeza aunque, claro, en ediciones harto limitadas y sin ningún provecho financiero.

-Cuando fui poeta, sin interesarme por la vida de mi patria, obtuve satisfacciones de toda suerte. A los 34 años era lo que suele llamarse una figura galardonada. Después, al empezar a inquirir sobre cómo somos, súbitamente se me cerraron todas las puertas. Y pasé a ser un hereje, un falsario, un degradado… ¿Y qué decir de mi viaje a La Habana? Ocurre que en La Habana yo era alguien bien visto, bien remunerado, con o sin política. Aquí había llegado al preclaro estado de haberme agostado durante treinta años en un oscuro empleo de Correos cuya atención compartía con la enseñanza en un colegio secundario de La Plata. En La Habana me sentía querido, aquí olvidado...
TEXTO COMPLETO  EN: 

lunes, 26 de noviembre de 2012

NUEVOS TEXTOS EN REVISTA CONTRATIEMPO


(12 años en la red)


Novedades Noviembre 2012


NOTA EDITORIAL
Nosotros tampoco olvidamos

INFORME ESPECIAL N° 4 / SEGUNDA ENTREGA
Puerto Madero: la ciudad privada

LITERATURA
Oliverio Girondo: en tranvía a la Masmédula
 
GÉNERO Y LENGUAJE
La Ciencia Ficción desde las Ciencias del lenguaje



Otras novedades 2012:
Buenos Aires: la historia económica y la historia militar construyen la ciudad
La ciudad clásica en la urbe hispanoamericana
Karl Marx y su obra en el Siglo XX.  
Sobre Nietzsche y el masoquismo occidental
Los rostros de las palabras: sobre la autobiografía de Sartre
La ciudad de Joyce


REVISTA CONTRATIEMPO

jueves, 22 de noviembre de 2012

LOS ESTILOS DE BORGES


Contratiempo EDICIONES

NOVEDADES NOVIEMBRE 2012
YA ESTÁ EN LAS LIBRERÍAS / Ver sitios de distribución


Los estilos de BORGES:
entre la nación y el universo
ZENDA LIENDIVIT
Ensayo / Colección Espacio, Literatura y Política


El barrio y la eternidad:
La primera fundación / El puerto, las orillas, la extranjerización de Buenos Aires /
El fragmento y el barrio / La Modernidad transversal / Aristocracia y masificación / La eternidad y la caducidad …
(Luna de enfrente; Carriego; Hombre de la esquina rosada; Sentirse en muerte; Fervor de Buenos Aires, etc.)
 Historia de una emboscada:
 Instrumentalidad y artificio / Del mito a la pesadilla / El tiempo y el espacio / La metrópolis moderna y posmoderna  /
Literaturas menores / Efectos de una literatura canonizada …
(Ficciones; El escritor argentino y la tradición, etc.)
Textos precursores
Poe, Kafka, Döblin, la Modernidad metropolitana, Los nuevos orilleros




lunes, 5 de noviembre de 2012

LEONARDO FAVIO / Gracias por la infancia compartida

Nosotros tampoco olvidamos

Estábamos pensando la nota editorial de los 12 años de vida de Revista Contratiempo (cada año es un poco más difícil) cuando nos enteramos de la muerte de Leonardo Favio. Nos vienen a la cabeza esos films-cismas como Crónicas de un niño soloAniceto y la FranciscaEl dependiente. Sin embargo Favio para nosotros fue, primero, ese muchacho enamorado que escuchábamos en la infancia a fines de los años 60. Rodeado de cantantes nueva oleros y pasatistas, había algo en la voz de Favio que parecía refundar el género romántico. Una indagación que partiendo de la trivialidad nos ponía en vecindad con cuestiones que entonces orillaban la magia y el misterio. Escuchar a Favio era como abrigarse al calor de un sol negro, una luz siempre interrumpida por sombras para las que jamás encontrábamos palabras ni significados últimos.


Murió Leonardo Favio y su muerte, en la Argentina actual, parece una metáfora. Una metáfora de la ausencia, de la paulatina desaparición de palabras fundacionales y búsquedas creadoras. Hoy nos rodea el palabrerío, la risa chabacana, el descrédito del otro a través de pantallas, micrófonos y audiencias capturadas a fuerza de estímulos anestesiantes repetidos hasta el hartazgo. Una sobredosis que se ensaña con el lenguaje y las ideas para hacerlos trizas y reemplazarlos por tilinguerías de consumo masivo. Pensar que el país se paraliza por un par de códigos alfanuméricos, moda pos atentados del 11 de septiembre, es el colmo de la estupidez. Un verdadero insulto a la inteligencia colectiva –que existe y es la que suele definir cuáles son los temas que le interesan a un pueblo, a una época, a una cultura. Ya sabemos que cuando un poder se siente en peligro es capaz de cualquier cosa. Ya conocemos esa historia de profetas a sueldo que salen a la arena a reclutar fieles en pos de causas que solo buscan el rédito propio. Ya sabemos también cómo terminan esas historias. Y sobre todo, tenemos memoria. No necesitamos que esos nuevos libertadores de peligros inventados nos hablen, con música litúrgica de fondo, de las bondades de los principios democráticos que en su momento se encargaron de demoler. O de las bondades de un sistema que sigue cosechando muertos por inanición, por corrupción o por extrañamientos varios. Si no hay vida política, si no hay diálogo fundador, si no hay polémica creativa, no nos interesan estas formas de perder el tiempo. O de vencer a la muerte, que de eso es lo que se trata al fin y al cabo. Mejor, nos quedamos escuchando y viendo a Favio. O haciendo un año más revista Contratiempo.

NOTA EDITORIAL REVISTA CONTRATIEMPO NOVIEMBRE 2012 
www.revistacontratiempo.com.ar



Fotos 1968/69

sábado, 3 de noviembre de 2012

NOVEDADES REVISTA CONTRATIEMPO 2012/13


(12 años en la red)



NOVEDADES 2012/13



Informe Especial N°4
Buenos Aires desde el margen

Segunda entrega: noviembre-diciembre 2012
…………………………………………………………………..……………………………………………
Riachuelo
Primera Entrega Junio-Agosto 2012
...............................................................................................

Nuevas travesías / El libro de las ciudades
romanticismo, bohemia
y modernidad:
Viena / Praga / Munich / Weimar
Febrero 2013
(fotos y notas de viaje se irán publicando en el Blog del sitio)





Edición Impresa
Revista Contratiempo N° 4
Sale en 2013 (número especial)


Además:
Sigue en las librerías y en la red
REVISTA CONTRATIEMPO N° 3
Arte, Pensamiento y política





Revista Contratiempo

jueves, 25 de octubre de 2012

CINE / MAMUT

Peligro de extinción


Más allá del destino individual, los hijos permiten a los padres morirse tranquilos. En principio, porque con ellos hicieron lo único importante para la especie: preservarla. Los niños de Mamut, el film de Lukas Moodysson, dan testimonio de esta urgencia temporal redimensionando el universo de propios y extraños en una continuidad indiferente a las formas aparentemente desconectadas. La cámara, ubicada con frecuencia en el margen y esquiva a los planos abiertos, devela que el objetivo principal no es la cuestión social o humana de los personajes, y sus obvias situaciones especulares, sino la integración de los fragmentos en esa totalidad ausente. Tal vez, como los mismos mamuts, nuestros huesos desenterrados sirvan en el futuro para fabricar bolígrafos; tal vez nos extingamos porque olvidamos que el sentido del presente también se escribe en el futuro. Sin continuidad, o lo que es lo mismo, sin posibilidades de transmitir el legado, lo único que queda, aquí, en Nueva York, en Bangkok o en una remota aldea filipina, es la desesperante trivialidad camuflada de artificios civilizatorios. Gloria, la niñera filipina, y Ellen, la prestigiosa cirujana neoyorquina (y de alguna manera también la prostituta tailandesa), toman consciencia de ello a través de la catástrofe: los cuerpos violentados de los niños reubican las cosas en su lugar. Por lo menos, provisoriamente.


martes, 23 de octubre de 2012

BORGES: ESPACIO, LITERATURA Y POLÍTICA


ANTICIPO EDITORIAL / SALE A FINES DE OCTUBRE
Los estilos de BORGES:
entre la nación y el universo
ZENDA LIENDIVIT
Ensayo / Colección Espacio, Literatura y Política


Sumario:
El barrio y la eternidad:
La primera fundación / El puerto, las orillas, la extranjerización de Buenos Aires /
El fragmento y el barrio / La Modernidad transversal / Aristocracia y masificación /
La eternidad y la caducidad …
(Luna de enfrente; Carriego; Hombre de la esquina rosada; Sentirse en muerte;
Fervor de Buenos Aires, etc.)
 Historia de una emboscada:
 Instrumentalidad y artificio / Del mito a la pesadilla / El tiempo y el espacio /
La metrópolis moderna y posmoderna  /
Literaturas menores / Efectos de una literatura canonizada …

(Ficciones; El escritor argentino y la tradición, etc.)
Textos precursores
Poe, Kafka, Döblin, la Modernidad metropolitana, Los nuevos orilleros





miércoles, 3 de octubre de 2012

CARAVAGGIO EN EL BELLAS ARTES

Allí estaremos

ACTUALIDAD / CRÍA CUERVOS

Cría cuervos
Qué peligrosos resultan estos diagnósticos que se lanzan como piedras sobre inexistentes sujetos colectivos, apuntando justo al corazón de las debilidades humanas. Peligroso por varios motivos: el más obvio es que los que los formulan no son psicólogos, psiquiatras ni nada por el estilo (Nietzsche, que era filósofo-psicólogo, ha muerto y no dejó herederos). Después, porque el resentimiento siempre funda esclavos. Y finalmente, porque la argumentación es tan reductiva y sobre todo descalificadora, que no promueve al paso siguiente. Clausura antes de empezar. Es llevar la discusión política al subsuelo. Algo así como cuando en la infancia decíamos “te voy a acusar con tu mamá”, “me hace burla” y demás. Aunque hay un estereotipo detestable tanto del hombre como de la mujer de clase media, muy bien retratado y sobre todo con más gracia por Arlt, hay que reconocer también que con los estereotipos jamás se hizo nada demasiado creativo. La carne y el hueso reclaman otros tratamientos (y ni qué decir si después se los va a necesitar para el voto). Una cosa es la actitud polémica, siempre vital y activa, y otra, la actitud incendiaria, reactiva, que luego protesta al quedar entrampada en su siembra. La Argentina, por historia, debería tener un poco más de cuidado con estos usos de la violencia, sobre todo cuando parten del poder. Nadie podrá decir que es lo mismo que un ciudadano o un grupo de ciudadanos comunes vociferen o deseen muertes grupales a que lo haga un gobierno. Nunca es la misma responsabilidad. Son exabruptos: la gente suele ser así cuando se transforma en horda, un poco bravucona suele dejar cementerios virtuales a su paso. Maldecir es privilegio del pueblo, no de sus gobernantes. Y no dejarlo pasar, es mostrar una debilidad extrema, una inseguridad desconcertante. Como si se oliera el miedo. Y esto nos lleva a otro razonamiento: el miedo también esclaviza. Deja flancos demasiado abiertos para que aquellos otros poderes, agazapados en la sombra, den el zarpazo servido en bandeja por el argumento pasional, por la provocación gratuita. Al fin y al cabo, cuando la comunicación se reduce a esa mínima expresión, ¿cuál es el paso siguiente? El mismo que en la infancia cuando alguien nos hacía burla, nos ostentaba lo que no teníamos, lo que no éramos, lo que deseábamos: acorralados por la afasia y la impotencia, asestábamos el manotón al cuerpo del otro y con eso zanjábamos la cuestión.  Nos íbamos a cenar, a dormir y a esperar el día siguiente para volver a jugar con nuestra víctima-verdugo. Pero avisamos: la infancia se terminó.

sábado, 29 de septiembre de 2012

BORGES, EL BARRIO Y LA ETERNIDAD

Borges, el barrio y la eternidad:
la primera fundación
El tema del barrio fue fundamental en la idea de un nuevo tipo de ciudad burguesa que vendría a suplantar al fallido esquema de ciudad liberal de Roca y Alvear. El barrio, como espacio relegado en relación al centro –espacio donde se mide el verdadero potencial de una metrópolis-, funciona como partícipe necesario de aquel desarrollo tecnológico, una especie de patio de atrás donde la sociedad queda estratificada de acuerdo al grado del nivel comunicacional y de infraestructuras así como por las características topográficas y las actividades predominantes de cada zona. Ese barrio que detesta Arlt, por considerarlo mediocre y falto de expectativas, donde todos se conocen, habitado por modistillas, comerciantes envidiosos del éxito ajeno y demás, surge en Borges tanto como espacio simbólico y primigenio de una identidad y de una lengua, así como estrategia de conservación de un privilegio que se perdía en el anonimato metropolitano. El barrio, por su misma precariedad, es el escenario donde todavía se puede recrear jerarquías y construir mitos al margen del proceso capitalista ...

LEER LA ENTRADA COMPLETA EN: 
http://www.revistacontratiempo.com.ar/borges_liendivit.htm


viernes, 28 de septiembre de 2012

A PROPÓSITO DE "INFANCIAS CLANDESTINAS"

PARAGUAY: La infancia de los otros


Fragmento del libro en construcción, “APUNTES PARA UNA BIOGRAFÍA”, publicado en Revista Contratiempo el día 1° de mayo de 2008
Y en el libro “EL CENTRO Y LOS VÉRTICES. Textos e imágenes de la vida moderna” (Contratiempo Ediciones, Zenda Liendivit, Octubre 2011)

Envuelto entre las bolsas del supermercado, papá traía a casa el periódico del Partido Febrerista, y nosotros leíamos, no lo comentábamos, no se hablaba, pero lo leíamos. “Los gritos de los detenidos inundan las noches asuncenas, desde el Departamento de Investigaciones”, decía el periódico que vaya a saber cómo circulaba por Asunción a mediados de los setenta. Y leíamos de torturas y torturados, de campesinos asesinados, esos con los que Stroessner se abrazaba para las fotos, y que sí, lo amaban porque era el líder, aunque ya no prometía tierras y la reforma agraria era cosa de los apátridas y sanguinarios que atestaban las cárceles. Se pueden escuchar los gritos, decía el periódico, y nosotros, que ya no éramos niños, pasábamos las noches en nuestras camas, pensando en los alaridos que retumbaban en las calles desiertas del centro de Asunción, en las calles desiertas de todo el Paraguay a la noche, porque siempre, desde que teníamos memoria, había habido estado de sitio. Y nos acordábamos de las balas que escuchaba mamá 30 años atrás y por un instante nos sentíamos clandestinos, como esa prensa que se infiltraba en las casas a hurtadillas, envuelta en bolsas de supermercado, o como la juventud de papá.



jueves, 20 de septiembre de 2012

LOS ESTILOS DE BORGES: ENTRE LA NACIÓN Y EL UNIVERSO


ANTICIPO EDITORIAL
Los estilos de Borges:
e
ntre la nación y el universo

Tanto la literatura como la ciudad constituyen espacios susceptibles de ser colonizados y transformados, como dice Martínez Estrada, en instrumentos de dominio. Pensar la relación de los procesos urbanos con los mecanismos de la ficción no es tarea ociosa. Hubo una Buenos Aires que, con su entrada a la Modernidad, fundó la literatura de Borges; hubo, al mismo tiempo, una poética entretejida a Buenos Aires que tuvo la intención de refundarla, ya fuera como mito nacionalista, influenciado en las vanguardias internacionales de los años ‘20, o como pesadilla posmoderna de los ‘40. Ese movimiento que se alimenta recíprocamente y que lanza a una al terreno de la otra deja su huella en gran parte de la literatura de fines del siglo XIX y principios del XX. Ambas, literatura y ciudad, se transforman en espacios de conocimiento y reflexión tanto de aquellos temas de la época, como la construcción de la nacionalidad, la cultura, la lengua, el acceso, la pertenencia, así como las formas de leer, configurar y transmitir la historia. La obra de Borges refleja también ese tránsito de Buenos Aires como ciudad recién llegada a la modernidad en los primeros años del Siglo XX hacia la metrópolis posmoderna de las décadas de la posguerra y que encuentra su correlato en la Buenos Aires actual.
La literatura no deja de ser una experiencia estética, el poder ingresivo radica en sus formas de construcción que, yendo más allá de las palabras y del autor, se espeja tanto en el contexto de producción como en las transformaciones o efectos que ella misma provoca. Reflejo que suele desvirtuarse en fórmulas vaciadas de estas tensiones y convertidas en bien de uso tan redituable cuanto mayor sea el proceso de desmantelamiento. Cualquier gran obra plantea sus propias líneas de fuga, las tiene previstas ya en su misma génesis. Y secretamente, siempre aguarda por ellas. Sofocar esas posibilidades vitales en manos de sistemas de control, provengan de donde provengan, ya sea a través del silenciamiento de lo otro o de panteones anquilosantes, es desactivar ese poder ingresivo y abismal al que nos enfrenta todo arte. Los dioses han muerto hace rato. Los estilos de Borges: entre la nación y el universo fue escrito con este espíritu.


Fragmento de la Introducción del libro "Los estilos de Borges: entre la nación y el universo" / Zenda Liendivit. Contratiempo Ediciones, 2012 (en imprenta)


miércoles, 22 de agosto de 2012

BATMAN, EL CABALLERO DE LA NOCHE

Ciudad Gótica

Hay que invertir en conocimiento y prevención, así debería Ud. retornar al mundo, le dice Alfred a un Batman-Wayne retirado de la actividad justiciera desde hace largo tiempo. Nada de máscaras, capas y batimóviles, esos tiempos pasaron. Quedaron atrás con la misma infancia. El mal ya no está focalizado en un sitio o personaje sino que el tema es un poco más complejo. Está, en realidad, en las mismas estructuras, funda y destruye a la vez. Por eso, la receta del mayordomo no parece inverosímil para el siglo XXI. Gatúbela, la encantadora y eterna enemiga, lo ratifica: quiere abandonar Gótica porque está harta de la maldad ciudadana. Y hasta los villanos de este último capítulo de la trilogía de Nolan no son más que la producción indeseada de una ciudad que tarde o temprano terminará por devorarse a ella misma. Pero, ¿cómo hacer entonces un film de superhéroes en un siglo que ya enterró disfraces y grandes ideales? Si ya no se puede domiciliar al mal ni tampoco al bien, ¿qué conflictos sostendrán los nuevos relatos? Y de manera más general, ¿cómo sostener una ficción cuando la palabra  está en crisis? Hollywood lo resuelve de manera brillante con las infinitas posibilidades del lenguaje visual, con la utilización de efectos y ediciones que provocan criterios de verdad más ingresivos aún que cualquier discurso. De hecho, todo discurso verbal en el film adquiere tono de cómic o de aburrida moralina.  Sus poderosas megaproducciones se espejan en el contexto de la cultura en general: sus modos de transmisibilidad, indudablemente, están cambiando. Ya no hay héroes con capa ni infancia posible. Ni palabras plenas ni grandes emisores confiables. Hay apenas el murmullo de una ruina que resistiendo al tiempo, como el casi siempre derrotado Batman, traza los límites de lo que no se puede escapar –esa Gótica maldita y fascinante-  y que a la vez exige nuevas formas para ser pensado. 

jueves, 16 de agosto de 2012

BUENOS AIRES DESDE EL MARGEN / RIACHUELO

Riachuelo
Hay ciertos lugares en la ciudad que generan sus propios rituales de pertenencia y exclusión, que interceptan diferentes realidades, haciendo oscilar al tiempo y al espacio metropolitano y planteando nuevas formas de vida. Lugares que se proyectan y reproyectan desde la historia o desde la ficción, desde el deseo o la negación, que implican tanto a la geografía como al concepto. Los planos y el lenguaje suelen ubicarlos en el borde, aunque estén en el mismo centro de los sistemas instituidos. Producen ciudad y son producidos por ella, a veces como desechos, otras como singularidad. No ostentan su condición de marginales como estrategia de marketing o postura contestataria sino como una forma de devenir. Suelen estar rodeados de cierta mística, o por oscuridades del pasado que sobreviven en el presente o por esa facilidad que poseen de escapar del orden de valores imperante, de las buenas costumbres, de la moral, los códigos y hasta de la lengua que legisla y legitima. Un recorrido por ellos es el objetivo de este nuevo informe especial de Revista Contratiempo.


Actualización Revista Contratiempo / Buenos Aires desde el margen



viernes, 20 de julio de 2012

PORTO ALEGRE (3): EL MERCADO PÚBLICO: BOHEMIA Y CAPITALISMO














(Fotos: Mercado Público, interior y alrededores / Z. L, Julio 2912)
Bohemia y Capitalismo
Conforma una pequeña ciudad dentro de otra: hombres y mujeres, en fila frente a coloridos mostradores y vitrinas, conversan, eligen y compran; o deambulan por los pasillos con bolsas, comparando precios. El poderío de la zona, pasado y actual, estalla en sus mercancías: hay de todo, desde productos agropecuarios hasta antigüedades de cualquier época y procedencia. El murmullo es constante y de a ratos nos retrotrae a aquella atmósfera del film de Scorsese, La invención de Hugo Cabret, donde el espacio de la terminal generaba también un microclima, de alguna forma, contestatario  (o de aquella Galería en Londres, el  Leadenhall Market de la que alguna vez hablamos en estas crónicas). Es mediodía y el Mercado Público de Porto Alegre está en su hora pico. En la planta alta, entre restaurantes y puestos de venta de discos de pasta, se halla el Memorial del Mercado, un espacio pequeño que a través de paneles cuenta la historia del lugar y sus transformaciones en el tiempo. Una historia conocida: ingenieros extranjeros que construyen a mediados del siglo XIX, en los puertos más prometedores de América, estas gigantes instalaciones de estructuras de hierro y madera para almacenar, abastecer y exportar las riquezas del territorio y organizar y administrar la vida del pueblo. El Mercado Público, además, albergaba hoteles, compañías de seguro y peluquerías y a principios de siglo XX, oficinas comerciales, industriales y reparticiones públicas. Cuenta la historia que entre las décadas del 40 y 60 fue el centro de la bohemia de Porto Alegre, el punto de encuentro de artistas y libertinos,  que según dicen, “se reunían, recorrían la ciudad, cantaban, bebían y desafiaban las costumbres de la época”. Algo de todo eso aún pervive en el bello Mercado, a pesar de esa modernísima vecindad de moles de vidrio y acero que intenta acorralarlo.








jueves, 19 de julio de 2012

PORTO ALEGRE (2): LA USINA, LA RESISTENCIA Y EL PUERTO

La Usina del Gasómetro, la resistencia y el Puerto
En los alrededores de la Usina do Gasómetro, la hermosa fábrica devenida centro cultural, se respira una bohemia que seguramente intentará resistir lo que vendrá: la transformación del frente portuario, hoy bastante abandonado, en un polo de ocio y negocios al estilo Puerto Madero de Buenos Aires. Murales pintados en las casas del barrio, garajes transformados en atelier, librerías de viejo, espacios multiculturales y bares para artistas excomulgados constituyen el entorno de la fábrica. Enfrente, las orillas del Guaiba funcionan no solamente como miradores de románticos atardeceres sino como refugio de los sin techos que se instalan con sus carpas y se dedican a la pesca como medio de subsistencia. El retorno a la naturaleza, comenta con una sonrisa burlona el taxista que nos lleva por la avenida costanera Pereira Paiva rumbo a las zonas más prósperas de la ciudad.









(FOTOS: ZENDA LIENDIVIT / JULIO 2912)

miércoles, 18 de julio de 2012

PORTO ALEGRE: LA PRIMERA VEZ

























FOTO: PORTO ALEGRE / JULIO 2012

Llegamos a Porto Alegre a las tres de la tarde, hace frío pero no es la helada Buenos Aires que dejamos a la mañana. La primera vez en una ciudad siempre genera expectativa: por un lado, todo es desconocido pero también, fragmentos de otras ciudades se dan cita en la novedad y el descubrimiento se trastoca, a ratos, en reconocimiento. Cae la tarde y el centro histórico está en ebullición. Como toda metrópolis populosa, la actividad laboral afuera compite con la de adentro de los edificios: vendedores ambulantes, cambistas, ferias de lo que sea, puestos de comida y mendigos se disputan el espacio público y se abren paso entre la gente que sale de las oficinas. Apenas unas horas después, eso estará desierto. Hay calles demasiado oscuras y cierto racionalismo degradado de los años 50 define un perfil que oscila entre la decadencia y la prosperidad. Extremos que se traducen en su topografía: Porto Alegre, como San Pablo, transcurre en niveles. Salvar las diferencias es el desafío.

lunes, 25 de junio de 2012

PARAGUAY / ENTRE LUGO Y FRANCO





















FOTO: DIARIO ULTIMA HORA (PLAZA DE LOS CONGRESOS / 22 de junio de 2012)


Bailando con los más feos

La teoría política suele toparse con duros escollos y resultar ineficaz para comprender una determinada coyuntura. Poderosos muros, con fundaciones ancestrales, pueden erigirse de golpe, torciendo el rumbo de la historia. Los gobiernos responsables de una masacre,  o son dictatoriales o tienen escaso futuro.  La política, las instituciones, la vida cotidiana, y todos los modos de representación entran en crisis frente a la liquidación intempestiva de vidas en manos del Estado. Como un furibundo cross a la mandíbula, un crimen de esas características advierte del fracaso y la inutilidad de toda producción o saber cultural. En Paraguay, la relación entre la geografía, el espacio y la práctica política está entretejida por fuerzas subterráneas que fluyen indóciles y articulan tanto la consciencia trágica heredada de la historia como la comunión entre el hombre y la tierra. Una cosmogonía, fundada y sostenida por el guaraní, muy diferente al saber occidental aunque no necesariamente opuesta. El coloradismo nació, o por lo menos prendió, con esa certeza y esa certeza es la que lo mantuvo y lo mantendrá seguramente en el poder durante mucho tiempo. La matanza de campesinos –aquí no hay discriminación: el asesinato de policías no es menor pero definitivamente no comparten la misma carga simbólica- en un país esencialmente campesino como Paraguay resulta intolerable. Todo poder fascista que opera en Paraguay lo sabe. No hay argumento posible que resista a ese dispositivo murario que con extrema facilidad suele transformarse en paredón y sepultura. Favorecer su construcción, ubicarlo justo en el centro de la escena, es la mejor estrategia para lograr de manera pasiva la obtención de sus fines.  El asesinato de campesinos en Curuguaty quebranta, desde las entrañas del poder legal, esa relación íntima que al fin y al cabo es lo único que configura a más de la mitad de la población paraguaya. Y que actúa sobre el resto como una forma de memoria colectiva, incluso en aquellos habitantes de las metrópolis, globalizados, informados y con una educación democrática mucho más significativa que el habitante rural. A partir de allí, lo demás se convierte en pura circunstancia: las fuerzas ilegales que operan en la zona, el empresariado terrateniente y apropiador de épocas pasadas, las reiteradas invasiones de los sin tierra en busca de resarcimiento histórico, la arbitrariedad del escaso tiempo otorgado a Lugo para defenderse, el posible aislamiento del país por parte de los otros países de la región, incluso, la democracia misma y el oportunismo alevoso caen, temporariamente, en un segundo plano. Franco lo dejó muy en claro tanto en su entrada triunfal al Congreso –sonreía como si hubiera ganado una elección-como después en su discurso: habría Reforma Agraria, lo expresó en castellano y en guaraní. En Paraguay la historia nunca entra en la historia, el tiempo es un presente continuo que a lo sumo, se alimenta de eternas repeticiones. 

domingo, 17 de junio de 2012

¿QUÉ PASÓ EN CURUGUATY?

FOTO: DIARIO ABC Color (Paraguay)

¿QUÉ PASÓ EN CURUGUATY?

Condenamos la violencia y la masacre del 15 de junio. Reclamamos el esclarecimiento de los hechos, el fin de la impunidad, de los siniestros latifundios, de la apropiación empresarial de las tierras, de la corrupción que mata. Exigimos algo más que destituciones.
Exigimos que nos digan qué pasó realmente en Curuguaty

Además de la pobreza extrema, la precariedad laboral, las inclemencias del clima y de la geografía de montes y esteros, la desnutrición y la ignorancia, el norte del Paraguay se halla asolado, desde tiempo inmemorial, por bandas criminales, y más recientemente por guerrillas rurales y ahora por militares. Frente a la cada vez más floreciente zona central, el norte parece condenado a un destierro eterno, una suerte de excomunión en el propio territorio donde más que habitar se vagabundea o se sobrevive, al azar de los bandoleros de turno. Una forma de extranjería de la que nadie se hace cargo, ni la dictadura del pasado ni las democracias actuales, como si fuera una situación natural, una suerte de maldición bíblica heredada a través de los siglos y estigmatizada, encima, por el carácter de zona de paso hacia el Brasil. O, en el peor de los casos, como escenario recordatorio de la gran derrota final de la guerra del 70.
(Fragmento de Crónicas Paraguayas: el norte)



ENLACES RELACIONADOS:

Paraguay: la infancia de los otros
Los mapas mudos