El problema de ser (verdaderamente) independientes
Espíritu de revancha, oportunismo político o la quinta pata al gato: en
fin, vaya a saber qué les mueve a ciertos poderes para seguir hostigando a
nuestra Editorial. Ya avisamos a nuestros "apretadores", que fueron
muchos este año, que próximamente haríamos pública, con solicitada incluida, la
detallada historia de esta persecución ideológica. Y no nos estamos
victimizando. Es la realidad que nos alcanza. Pero lejos de mantenernos
callados, vamos a hacer uso (y abuso) de nuestro derecho a réplica. En tribunales
y en los medios de comunicación. Quedan todos avisados.